La llegada de las lluvias ha resuelto temporalmente el problema de la sequía en Cataluña. Sin embargo, siguen siendo necesarias actuaciones, fáciles de emprender para reducir el consumo y estar preparados ante nuevos episodios que, sin duda, se repetirán

La instalación de un difusor en el hogar puede ahorrar hasta el 60% del caudal. En CCOO de Cataluña (CONC) han repartido más de 10.000 aparatos entre los trabajadores, lo que puede suponer un ahorro mensual de más de 500m3 de agua.

Al igual que otras comunidades autónomas del Estado, uno de los principales retos de Cataluña, tanto a nivel ambiental como económico, es la gestión del agua.

Las áreas metropolitanas de Gerona y Barcelona, donde se concentra la mayoría de la población catalana, quedaron afectadas por medidas excepcionales ante la falta continuada de lluvias. Desde 2004, en las cabeceras de las cuencas internas de Cataluña se han registrado niveles inferiores a un 60% respecto a la media. Se prohibía el uso de agua potable para riego (excepción para la supervivencia de arbolado agrícola) o para llenado de piscinas, con el objetivo de prolongar las reservas de embalses y acuíferos.

Padecemos todavía la herencia de un concepto de gestión hídrica obsoleto e insostenible. Propuestas como el trasvase del Ródano (caro, difícil, e inútil para la sequía de 2008) suponen, una vez más ofertar agua sin límite, separándose de los principios de gestión integral, de ahorro y de recuperación del medio indicados por la Directiva Marco del Agua.

La disponibilidad y la cantidad de recursos hídricos están estrechamente ligadas a los sectores productivos de bienes y servicios. El caso más evidente es el de la agricultura y la ganadería (llegan al 74% en Cataluña). Pero hemos de considerar que muchas industrias tienen consumos elevados de agua y que la falta prolongada de ésta puede afectar a su actividad

Ante la posibilidad de desabastecimiento de más cinco millones de habitantes y de gran parte de la actividad industrial de nuestra comunidad, desde CCOO hemos trabajado incluso antes de llegar a situaciones de emergencia, como la que hemos vivido recientemente.

¿Qué defendemos?

Hemos intervenido en diferentes ámbitos de participación institucional, redactado publicaciones y notas de prensa y participado en acciones reivindicativas, con los siguientes mensajes:

• Superación del concepto del agua como bien ilimitado.
• Gestión tanto de la oferta como de la demanda.
• Cambios en los sistemas de tarificación, que premien el ahorro e incluyan criterios sociales.
• Intensificación de los instrumentos de ahorro y eficiencia.
• Nuevos aportes de recursos hídricos en cada cuenca (bancos públicos de agua, reutilización, desalación, etc.).
• Mejora del entorno natural de las masas de agua.
• Información y participación de los representantes sociales.

Quizás la actuación de mayor impacto haya sido el reparto de elementos de ahorro de agua. La Agencia Catalana del Agua y entidades municipales impulsan una campaña continuada de sensibilización que incluía la distribución de filtros (también llamados difusores o perlizadores) para grifos de lavamanos, y CCOO participa activamente en el objetivo de reducir consumos.

Hemos distribuido 10.000 de estas piezas de uso doméstico directamente entre trabajadores que se han dirigido a sedes de CCOO y a través de diversas convocatorias del sindicato (asambleas, marcha ciclista, etc.). Conjuntamente con el kit de ahorro hicimos entrega de un documento que incluía buenas prácticas en el puesto de trabajo y en el hogar.

Los filtros permiten una reducción del consumo, en función de la presión de la red, de entre un 40 y un 60% del caudal. Desde el Departamento de Medio Ambiente calculamos que el ahorro probable producido con la instalación de estos elementos es de unos nueve litros por vivienda.

Como algunos compañeros y compañeras ya tenían instalados sistemas de ahorro, estimamos que esta actuación puede significar la reducción de 500 m3 de agua cada mes en toda Cataluña. Los efectos indirectos de la campaña de sensibilización son más difíciles de computar, sobre todo en relación a la repercusión sobre las actividades productivas. Pero son muchos los compañeros y compañeras de CCOO que a partir de este tipo de iniciativas empiezan a replantearse el uso de ese bien tan preciado que es el agua.

José Manuel Jurado
jmjurado@conc.cat