Los Delegados de Prevención de CCOO de Construcción y Auxiliar de Ferrocarriles S.A. (CAF) estamos muy sensibilizados y preocupados por la presencia de sustancias cancerígenas en la empresa. El interés está motivado, en especial, por la muerte de veintiún compañeros, tanto en activo, como jubilados y prejubilados, como consecuencia de haber realizado trabajos con exposición a amianto, material cancerígeno con el que se trabajó en la empresa durante 25 años.

Además de trabajar para conseguir compensar a las víctimas y sus familiares, pensamos que es importante evitar la exposición de los trabajadores a cualquier cancerígeno. Para ello, llegamos a un acuerdo verbal con la empresa de no realizar ningún tipo de trabajo con sustancias cancerígenas de grado primero y segundo. Este acuerdo ha sido adquirido además por el Presidente del Comité de Seguridad y Salud.

En noviembre de 2003, los trabajadores nos requirieron que investigásemos la composición de un adhesivo (REDUX 609) utilizado para la unión de unas rejillas de aluminio a chapas de acero de las puertas de los vagones.

A partir de la información de la ficha de datos de seguridad (en inglés), consultamos varias bases de datos y a la asesoría de Salud Laboral de nuestra Federación Minerometalúrgica, y descubrimos la presencia de una sustancia de posibles efectos cancerígenos, el diurón (CAS 330-54-1), junto a resinas epoxi con bisfenol-A (CAS 25068- 38-6), sustancia sospechosa de ser disruptora endocrina.

Ante la presencia de una sustancia cancerígena en un puesto de trabajo, paralizamos la actividad en ese puesto y solicitamos a la empresa la inmediata sustitución del adhesivo utilizado. La inspección de trabajo fue requerida por la empresa, pero el inspector se limitó a indicar las medidas de protección necesarias y no encontró problemas con que se continuase con la actividad. Ante el compromiso adquirido por la empresa de no utilizar cancerígenos, los delegados solicitamos en el Comité que no se reanudara la actividad.

La empresa accedió a nuestra petición y a los pocos días sustituyó el adhesivo con el cancerígeno por el adhesivo Scotch-Weld 7240 de la marca 3M.

Solicitamos ayuda a ISTAS para analizar el sustituto propuesto, quien nos entregó un informe en el que nos advertía de la presencia de un disruptor endocrino, sustancias sensibilizantes e irritantes en la composición del adhesivo sustitutivo, proponiendo cambiar las uniones con adhesivos por uniones mecánicas, ante los riesgos para la salud y el medio ambiente de los adhesivos utilizados en este tipo de uniones. También nos presentaron varias propuestas de intervención para prevenir los riesgos de las sustancias químicas peligrosas, que hemos trasladado a la empresa.

A partir de aquí, nuestros planes de trabajo sobre riesgo químico consisten en el seguimiento continuo de las fichas técnicas de los productos y de las evaluaciones de riesgo para controlar su peligro sobre la salud y el medio ambiente, la sustitución de cualquier producto o preparado cancerígeno que detectemos y la adopción de las medidas necesarias para reducir los riesgos de las sustancias peligrosas presentes en la empresa.

Entre las principales dificultades que encontramos para que se eliminen las sustancias peligrosas se encuentran la dificultad de acceder a información sobre sustancias químicas peligrosas, los continuos cambios de clasificación de las sustancias y las complicaciones que supone para el sector ferroviario cambiar sus procesos de producción.

Más información:

Olegario Sancho y Jesús Julián
Sección Sindical de CC.OO. CAF Zaragoza
zcomite@caf.es
Tel.: 976-765100

Ricardo Badía
Federación Minerometalúrgica de Aragón
Tel.:976-210370