La principal causa del mayor desastre nuclear de la historia (1986) residió en un error de concepción de este tipo de reactor nuclear (RMBK, 950 MW) de forma que cuando los operadores trataron de detener el reactor, se produjo un aumento brusco de la potencia causando una explosión nuclear. El error de concepción era conocido antes del desastre. El desastre ocasionó la muerte de 321 personas, causó irradiación aguda a más de 130.000 personas y la evacuación de cientos de miles. Los efectos más graves, a largo plazo, están ligados a la contaminación radioactiva del suelo, cosechas, sedimentos y aguas. |